Comencemos por el principio… ¿Qué es la herbolaria?
La palabra #herbolaria procede del latín herbŭla, diminutivo de herba, hierba.
La herbolaria también conocida como #fitoterapia, es el estudio de las propiedades y el uso de las plantas medicinales para la prevención, la curación o el alivio de una amplia variedad de síntomas y enfermedades.
Forma parte de la medicina tradicional, que es el conjunto de conocimientos, aptitudes y prácticas basados en teorías, creencias y experiencias indígenas de las diferentes culturas para usos terapéuticos, curativos o preventivos en el tratamiento de enfermedades.
A su vez, la medicina tradicional forma parte de las terapias naturales o medicina alternativa, ya que éstas incluyen aquellas prácticas de atención de salud que no forman parte de la propia tradición de un país.
Un poco de historia….
El uso de plantas como recurso terapéutico natural se remonta a tiempos muy remotos.
En la prehistoria, los individuos mantenían una fuerte conexión con la naturaleza, en sus principios, de manera accidental, comenzaron a conocer qué plantas eran tóxicas o venenosas, así como también aquellas que eran fuente de sustancias con propiedades curativas. Estas experiencias pasaban a conformar parte de la cultura de estas comunidades y así pasar conocimiento de generación en generación.
Los testimonios del uso de plantas curativas más antiguos datan del 3000 a. C. En Sumeria.
Los egipcios y otras culturas mesopotámicas plasmaron sus estudios sobre medicamentos de origen vegetal y animal en tablas de escritura cuneiforme donde aparecían nombres como opio, marihuana, azafrán, mirra, mandrágora, belladona… todas ellas conocidas en nuestros tiempos.
Los griegos dieron el paso de romper la relación entre misticismo, religión y medicina, dando autonomía a la disciplina médica. Una de las figuras protagonistas fue el filósofo peripatético sucesor de Aristóteles, Teofrasto (372-287 a. C.) con el primer tratado sistemático de botánica farmacéutica “De Historia Plantarum”.
Hipócrates, fue otro griego de excepcional importancia en este campo, fue quien clasificó por vez primera de manera sistemática 300 especies de plantas medicinales, incluyendo también recetas, métodos de empleo y dietas, influyendo mucho, de esa manera, sobre el mundo romano y el pensamiento de la edad Media.
Durante la época romana es donde se comienza a hablar de “Farmacoterapia” en el sentido que la conocemos hoy en día. Cabe mencionar que de esta época son Plinio el Viejo (23 – 79 d. C.) con su obra enciclopédica de 37 tomos “Naturalis Historia de”, fundamental para comprender los conocimientos farmacológicos de los antiguos. Claudio Galeno (131-200 d. C.) que en sus libros codificó y sistematizó por primera vez fármacos procedentes del reino vegetal, animal y mineral.
Al caer el imperio romano, los conocimientos científicos médicos vendrán a ser conservados en los monasterios y desarrollados paralelamente en el mundo árabe, donde nace la #alquimia, madre de la química moderna.
Durante la Edad Media se incrementa el comercio de las especias y plantas medicinales, pero recién entre los años 400 y 500 d. C. se comienza con la ciencia botánica.
Con el descubrimiento de América, surgen nuevas rutas comerciales y aparecen nuevos materiales vegetales; ya que las civilizaciones Inca y Azteca poseían un profundo conocimiento del mundo de las plantas y hierbas medicinales.
Entre los siglos XV y XVII eran los herbolarios, los que describían con la botánica los conocimientos sobre las hierbas medicinales, y sus medicamentos por lo general surtían efecto.
Paracelso (1493-1541) fue el que produce un vuelco en la terapéutica ya que realiza estudios químicos concentrándose sobre los principios activos de las plantas.
A partir del siglo XVIII y el XIX, la aparición del estudio químico de la composición de los productos naturales y la síntesis de sus sustancias activas, la aparición de los antibióticos, el surgimiento de grandes industrias farmacéuticas, así como la fructífera relación entre la química y la medicina, dieron lugar a que los productos de origen natural, las drogas secas y los extractos, pasaran de un lugar preponderante a ocupar un segundo plano.
Este tipo de medicina se ha definido por tres escuelas de pensamiento: ayurvédica herboristería, herboristería tradicional China y occidental de la medicina herbaria.
En las últimas décadas del siglo XX se vuelve a alcanzar una presencia cada vez mayor en la Medicina Occidental por estas razones:
La Organización Mundial de la Salud (OMS) propuso a la Atención Primaria de Salud (APS), como estrategia involucrar a representantes de la medicina tradicional y sus métodos terapéuticos.
Países como China, Cuba, Sri-Lanka, Tailandia, entre otros, han inscrito oficialmente en sus programas de salud el uso de la medicina tradicional herbolaria, basado en el aval científico de algunas plantas medicinales.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece 4 objetivos de la medicina tradicional: inocuidad, eficacia y calidad, acceso y uso racional. Así mismo del mismo, identifica 3 tipos de sistemas de salud para describir hasta qué punto la Medicina Tradicional, Complementaria o Alternativa está relacionada con el sistema sanitario oficialmente reconocido: Sistema integrado, Sistema inclusivo y Sistema tolerante
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Re-conectando con la tierra
En la actualidad, las hierbas medicinales vuelven a cobrar fuerza por la apertura de consciencia de la población y la necesidad de reconectar con la madre tierra, “volver a lo natural, a lo básico”, buscando opciones, sin la utilización de químicos, para el equilibrio del cuerpo, mente y espíritu.
Entendemos que somos parte de un todo, un universo de infinitas posibilidades interconectadas ya que todo es energía; que se crea, comunica, interactúa y transforma.
Ventajas de las terapias naturales
1. Son más inofensivas para el cuerpo. Suelen carecer o tener mínimos efectos secundarios, siendo menos agresivas para nuestro organismo. 2. Son holísticos, no específicos. Promueven el bienestar general, mirando al cuerpo como un todo. 3. No tienen efectos a largo plazo. Al ser naturales son fáciles de asimilar y eliminar del organismo. 4. Son más económicos. Porque no estás pagando ni el laboratorio ni la patente. 5. No crean dependencia ni adicción.
6. Su objetivo es proteger, promover y mantener la salud y el bienestar, al mismo tiempo que prevenir el desarrollo o progreso de enfermedades.
Desventajas de las terapias naturales
1. No las someten a los mismos controles de calidad. 2. Son más lentos. Hay que tener en cuenta que las plantas tardan 3 días en conectarse con nuestro sistema y desde ahí comienzan a surtir efecto, por lo que el tiempo que tarden es hacer efecto es más prolongado que con medicamentos químicos. 3. Las dosis están poco controladas. No existe una receta específica de plantas a utilizar para cada enfermedad o sintomatología. Las dosis pueden variar entre diferentes terapeutas.
4. Son menos eficaces para aliviar un problema agudo, tardando más tiempo en disipar los síntomas o malestares. 5. Muchos tratamientos naturales no están cubiertos por el seguro médico, por lo que su costo debe ser asumido de manera completa por el paciente. 6. En casos de emergencia, su espectro es más limitado.
Sabías que …?
Un estudio realizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) determinó que alrededor del 80 % de la población mundial utiliza la herbolaria para curar ciertas dolencias o enfermedades.
Descubre toda nuestra alquimia con plantas medicinales en nuestra sección de Herbolaria
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